Cómo Alimentarnos para Fortalecer el Aprendizaje
Alimentarnos es el principal factor que contribuye en el crecimiento y desarrollo del ser humano incluso desde antes de nacer. Pues esto, fortalece el proceso de aprendizaje.
Del mismo modo en que un automóvil necesita combustible para poder funcionar, el cuerpo humano requiere alimentos para mantenerse sano y desarrollar su potencial al máximo.
Bien se sabe que a la hora de estudiar las actividades cognitivas están en pleno funcionamiento y se produce un consumo de energía que debe ser reestablecido por medio de la ingesta de alimentos.
En consecuencia, el cuerpo humano debe consumir los nutrientes necesarios y esto lo da una dieta balanceada.
De esta manera, el rendimiento intelectual mejora notablemente con la incorporación de nutrientes adecuados que favorecen el funcionamiento de neurotransmisores.
Por tal motivo, la implementación de campañas para hacer frente a patrones de consumo inadecuado que acentúen la desnutrición y enfermedades no transmisibles resultan necesarias.
El Estudio Latinoamericano de Nutrición y Salud (ELANS) encontró que en su mayoría los consumidores prefieren productos procesados y no naturales.
Donde la ingesta energética (IE) promedio, es de 1.959 kilocalorías por día, con una distribución equilibrada de 54% carbohidratos, 30% grasa, y 16% proteínas.
El problema radica en el detalle de estas comidas, ya que más del 25% de IE proviene de alimentos ricos en azucares y grasas.
Mientras que solo el 18% de la IE se origina de alimentos ricos en fibra y micronutrientes, como granos integrales, raíces, frutas, verduras, frijoles, pescado y nueces.
Por lo tanto, este desequilibrio nutricional afecta al 88% de países del mundo generando desnutrición aguda o crónica, deficiencias de micronutrientes, obesidad y enfermedades relacionadas con la alimentación.
Por el contrario, se ha comprobado que quienes siguen una dieta equilibrada logran un 14% superior de excelencia en relación de aquellos que no lo hacen. Además, se muestran significativamente más satisfechos con sus deberes.
Y es que la alimentación influye en nuestra actividad energética cerebral, como la capacidad de memoria, concentración, y el fortalecimiento del aprendizaje.
El cerebro es entonces el principal órgano del sistema nervioso central y está formado por neuronas que se comunican entre sí a través sustancias químicas llamadas neurotransmisores.
Dichas sustancias no son más que proteínas que obtenemos a través de la alimentación y su función es transmitir mensajes de una neurona a otra.
En este sentido, contribuyen a la formación del cerebro mientras que la glucosa representa el combustible de este extraordinario órgano. Que a su vez es el responsable de la memoria, el pensamiento, las emociones y el lenguaje.
Internamente es una maraña de cables eléctricos que se conectan entre sí. Y consume el 20% de energía del organismo.
Posee cien mil millones de células nerviosas y mil billones de conexiones neuronales llamadas sinapsis.
Debido a su extremada complejidad es que el cerebro consume tanta energía, y si queremos fortalecer nuestro aprendizaje debemos saber cómo alimentarnos.
Alimentos imprescindibles para nutrir nuestro cerebro y fortalecer nuestro aprendizaje
Por esa razón te ofrecemos hoy 7 alimentos imprescindibles para nutrir tu cerebro y por ende optimizar tu aprendizaje.
1.- Pescados Azules: Los ácidos grasos como el omega 3 son vitales para el cerebro y, por lo tanto, para la futura capacidad de aprender.
2.- Huevos: Contiene nutrientes como proteínas, vitaminas y minerales que mejoran la memoria y el funcionamiento del cerebro.
3.- Legumbres: Sus proteínas intervienen en la formación de las neuronas y el hierro oxigena el cerebro mejorando el rendimiento intelectual, y la concentración.
4.- Chocolate negro: El triptófano es un aminoácido esencial para fabricar serotonina, esta interviene en el estado de ánimo, promoviendo una sensación de bienestar y ayudando a mantener la concentración y las habilidades cognitivas.
5.- Frutos Secos: Poseen ácidos grasos poliinsaturados, es decir, grasas buenas que reducen el colesterol ayudando a mejorar la memoria y las funciones neuronales.
6.- Té verde: Sus componentes antioxidantes ayudan a relajarnos, mejoran la memoria y combate la fatiga mental.
7.- Yogures, leche y queso: El calcio contribuye a regular la función nerviosa y la presión arterial que suele elevarse cuando hay estrés.
En definitiva, un cerebro lleno de neuronas bien nutridas te permite pensar y recordar más claramente.
Por lo tanto, la clave para fortalecer el aprendizaje está en una alimentación adecuada, ejercitarse y tomarse un buen descanso.
“Comer es una necesidad, pero comer de forma inteligente es un arte”. – La Rochefoucauld.
